La primera vez de Saira

A pesar de las recomendaciones del medico de no tomar ni fumar, no hice caso. Sabía que eso empeoraría mi salud, pero al final me llegó, como muchas cosas, claro que sin querer queriendo y, sobre todo, por ser una fecha especial: el cumpleaños de JOSÉ CRUZ.
¿Quién michi es José Cruz? Bueno, es un amigo. Hermano de dos de mis mejores amigas, Saira y Silvia. Hay que mencionar que en la casa de ellos están al tanto de mi salud así que ese día no me dejaban tomar ni fumar y entre bromas me enseñaban la cerveza, la cachina y los cigarrillos. Para esto, la menor de los Cruz, Saira, tenía un pequeño “problemita” llamado Edison, su ex enamorado, quien había decidido viajar al extranjero. Saira me dijo:
- ¡Quiero tomar hasta morir!

¡¡¡¿Qué cosa?!!! Me sorprendió mucho porque ella nunca toma, es más, es la única amiga que toma agua mineral en las fiestas. Se sentó a mi lado con una jarra de cachina y empezó lo que más adelante se convertiría para las dos en una señora borrachera. Me dio risa porque se servía a vaso lleno y bebía la cachina como refresco: una, dos, tres jarras entre las dos ¡Carajo! Ahí empezaron las confesiones de amor.
Uno de los hermanos de Saira estaba sentado al lado nuestro escuchando nuestra conversa y preguntándome cuando nos casaríamos ¿? Y los demás decían lo mismo, claro que solo era broma, mientras que Saira ya borracha me decía: China ¿Por qué Edison se va a Costa Rica si yo lo quiero? Buuuu
- ¿Pero tú no querías terminar con él?
- Es que ya me di cuenta que lo quiero y no quiero que se vaya
- Bueno amiga, así son todos ¿Qué puedes hacer? -Y le pregunte a Jhon porque los hombre son tan cojudos.
- No somos cojudos, Chinita, pero yo te quiero.
- Siiii Jhon, pero yo no te quiero y tampoco me gustas.
Saira decía, como si estuviera cantando: Ellaaaa no te quiereeeeeeeeeeee y yo se de quien está enamoradaaaaaaaaaaaa –Y se reía como tonta. Es un secreto, yo no voy a decir que esta enamorada de…

¡Plop! Me tiró dedo ¡¡Me delató!! Pero, bueno, todos estaban borrachos.

Se nos acabó la tercera jarra y Saira, caminando en zic zac, fue a la cocina a sacar más cachina. Volteó la botella pero ya no había, insistió en que la botella vacía llene nuestra jarra y todos empezaron a reírse hasta que su hermana Katty nos trajo una jarra más. Saira seguía con su lamento de por qué Edison se iba, y yo le decía ¡¡Carajo, se va uno vienen cien!! Y ella entre lágrimas me decía: ¡Yo no quiero cien, yo solo quiero a Edison! Buuuuuuuuuuuu. Y reía haciendo un gesto con la mano, moviéndola de un lado a otro diciéndome: pero, yo sé de quién estés enamorada. En eso se nos dio por cantar ¡¡Qué vergüenza, dios mío!!
Ya no podíamos seguir tomando pero la pena y el trago hacían buena mezcla.
Saira me dijo: ¡Ya vengo, mierda, no te muevas que voy al baño!
Regresó y la llevaron a su cuarto para que duerma porque no podía ni pararse y me quedé tomando la cachina escuchando a Jhon: las cosas difíciles de la vida, los errores que cometemos cuando nos enamoramos y yo… Sólo quería ir al baño a vomitar.
No habían pasado ni diez minutos y Saira se levantó de su cama y gritó: ¡¡La Chinaaa, La Chinaaa!! Yo le prometí que íbamos a tomar hasta morir.
Fue al baño, luego quiso bajar las escaleras cayendo de rodillas antes de llegar a ellas; en ese momento su hermana Katty subía y la encontró de rodillas diciendo “la Chinaaa, la Chinaa, yo le dije que iba a tomar con ella”.
- Ya Sairita estas mareada mamita, vamos, descansa, sí.
- ¡Nooooooooooo! Yo no quiero dormir, yo quiero tomar -Quedándose dormida en el pasillo de su cuarto.

Continuando conmigo, me llevaron a mi casa y cuando mi madre me vio me dijo: ¿¿Estás mareada??
- Nooo, estoy bailando huayno -¡Qué fresca soy!
No sé como llegué a mi cama, pero, recuerdo que le dije a mi mamá que guarde mis lentes.
Me levanté muy tarde con malestar en todo el cuerpo y si decía algo lo primero que me dirían sería ¡¡Vete a la mierdaaa y no jodas, BORRACHAAAA!!

Lo que es Saira, fue la primera borrachera de su vida. Dos días después que la vi, sólo me dijo:
- Nunca más, pero nunca más, vuelvo a tomar ¡Lo juro!

Eso crees querida; una vez que pruebas, difícil lo dejas… Jajajajaja